Junto a mi buen amigo Antonio J. Ortiz, subí al torcal de Antequera para fotografiar desde allí el amanecer y nuestra sorpresa fue encontrarnos un fantástico mar de nubes que cubría totalmente las zonas más bajas brindando una belleza extraordinaria al lugar.
Mar de nubes bajo El Torcal
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Se aproxima el amanecer
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Sale el sol sobre el mar de nubes
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Amanecer tras El Tornillo
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